Libros gratis para viajar con la segunda/tercera ola: Francia

Por Leticia Bianca – @tododoble

Leticia Bianca vuelve a recomendar libros para que lxs amigxs de Sonámbula puedan llevar con algo más de alegría el impacto de la segunda ola (que ya se está transformando en tercera) de la epidemia que hace un año comenzó a golpear al planeta. Esta nueva tanda de textos recomendados se enfocará en distintos países, a los que en el marco de las restricciones de los viajes internacionales, sólo podremos trasladarnos por medio de la lectura. Después de los viajes a España y a Italia, hoy vamos a Francia. (Click en la tapa de los libros para acceder a los enlaces)

 

 

Acá está, era esto, otra vez: la segunda ola no es más que una sucesión de dejavus de la primera y 2021 no deja de recordarnos que existió ese distópico 2020, donde nuestra imaginación se expandió más allá de lo posible y la literatura apocalíptica se mudó de la ciencia ficción a la actualidad en los estantes de las librerías.

Y así como entonces buscamos con la literatura alienarnos de la realidad cada vez más agobiante, esta vez proponemos viajes literarios a lugares imposibles de llegar dadas las restricciones a la movilidad, solo accesibles con libros. En este caso nos dedicamos al país galo, cuna de plumas de renombre desde siempre hasta hoy y también de los mejores quesos del planeta.

 


 

 

Yoga, de Emmanuel Carrère

Publicado en 2020 en Francia y recientemente traducido al español, el onceavo libro del que podría ser considerado el genio contemporáneo de la hibridación entre periodismo y ficción es, en sus palabras, el “autorretrato de mi caída a los infiernos” y lamentablemente lejos está de ser su mejor obra. Sin embargo, sirve para retratar el impacto que ha tenido en la sociedad y la cultura francesa el atentado contra Charlie Hebdo, semanario satírico francés, en el que Carrère perdió amigos y colegas, y para adentrarnos también en el subgénero “Señores ricos con tristeza” ya explorado aquí.

 

 

 

 

 

 

Las Inseparables, de Simone De Beauvoir

Poco nuevo parecería que se puede decir de “LA” señora de las letras francesas, pilar teórico fundamental del feminismo del siglo XX, pero ella no para de sorprendernos. Esta novela, editada por primera vez en 2020, fue escrita en 1954, cinco años después de la publicación de El segundo sexo y narra la amistad apasionada que une a Sylvie y a Andrée -alter egos de De Beauvoir y Élisabeth Lacoin- desde que se conocen en la escuela y deben hacerle frente a la opresiva realidad de la época para las mujeres y niñas.

 

 

 

 

 

 

Las lealtades, de Delphine De Vigan

Ya cómoda en retratar los bordes filosos de la realidad luego de exponer su trastorno alimenticio en Días sin hambre (2001) y abordar su tensa relación con su madre en Nada se opone a la noche (2011), en este novela De Vigan cuenta la historia de Théo, un hijo de padres separados de 12 años que dada la horrible relación que media entre sus progenitores y la depresión de ambos, se vuelca a la bebida. Ácida y mordaz pero no por eso menos sensible, la pluma de esta ex publicista intenta buscar el valor de la amistad allí donde no parece haber nada.

 

 

 

 

 

 

Laetitia O El Fin De Los Hombres, de Ivan Jablonka

A caballo entre el mockumentary, la investigación periodística y el perfil psicológico, el profesor de historia Jablonka narra en este libro los sucesos reales de violación, asesinato y descuartizamiento de Laëtitia Perrais en un pueblo costero francés en 2011. Cuenta también cómo, tras el horror inicial, la policía, los medios y hasta el propio Nicolas Sakozy opinan sobre este horrendo crimen. Pero el logro de la novela es mostrar un perfil de Laëtitia más sociológico que personal, en el que también se termina colando una crítica al sistema de adopción francés y al Estado en su conjunto.

 

 

 

 

 

 

Babilonia, de Yasmina Reza

De la mano de la genial autora de ART (1999), la obra que estuvo más de una década en cartelera en Buenos Aires, se publicó en 2017 esta novela mitad retrato antropológico de la clase media francesa mitad intriga policíaca, que ganó en su momento el prestigioso Premio Renaudot. “Una película de los hermanos Coen”, dijo la prensa cuando se editó, para no spoilear unos giros de trama que resultan realmente desopilantes pero sirven para que Reza nos regale otra vez esa afilada mirada sobre la realidad con el tono burlón y tragicómico que ya disfrutamos en Felices los felices (2014).