Santa Maradona, reza por nosotros
Texto y fotografías de Jorge Hardmeier
Para despuntar el vicio maradoneano, Jorge Hardmeier recorrió, cámara en mano, hitos ciudadanos vinculados con la historia de Diego. Desde el nuevo circuito maradoneano en Paternal, que incluye la muestra Bendito (10) y La Cafetería de Dios, hasta la reciente iniciativa municipal en sus tierras natales de Fiorito: Comunidad de D10S. Pasen a disfrutar.
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(…) con la sonrisa de pibe, con el brazo guerrillero y el corazón de arrabal
la zurdita endemoniada y el martillo en el garguero, cada día te quiero más…
(“Para verte gambetear”, La Guardia Hereje)
Bendito (10) y Marcelo: Diego, el teatro en la tele de tu casa
Bendito (10) es una muestra de arte permanente y de piezas únicas de colección referidas a Diego, en Linneo 2196, esquina Álvarez Jonte. Enfrente hay un barcito: La Cafetería de Dios. El circuito Diego en La Paternal también incluye a La Casa de Dios, sobre la calle Lascano 2257, vivienda que adquirió Argentinos Juniors para la familia Maradona al debutar Diego en Primera, hoy transformada en museo, además de la propia cancha del Bicho y otros satélites que convirtieron al barrio en un indiscutible polo maradoneano.
Bendito (10) y César Pérez, de La Casa de Dios, aunaron voluntades para el recientemente inaugurado museo sobre la calle Linneo. Los murales con la cara de las diversas épocas del Pelusa abundan por las calles del barrio. Marcelo Chiarello, proveniente de la psicología social, mosaiquista y generador de ese sueño titulado Bendito (10) comenzó con su proyecto en el barrio de Mataderos, en un local ubicado en la casa de su madre: “Yo empiezo en Mataderos a armar un lugar de arte con fútbol, con deporte, hasta que se me dio por hacerle un homenaje al más grande. Empecé a juntar cosas de Diego, a relacionarme con coleccionistas, juntaba figuritas. Empecé por otro lado a realizar piezas con motivos de Diego y, cuando me quise dar cuenta, tenía un lugar armado al que llamé Bendito (10). Estuve ahí tres o cuatro años y, al fallecer mi mamá y mi tía, me ofrecen venirme para La Paternal, un amigo de La Casa de Dios, que también tiene este espacio».
«Acá estamos desde septiembre de 2024 y vamos, día a día, conociendo más gente, nos visitan de otros países, es muy gratificante. Hay mucho amor, mucho laburo. A la mitad de la etapa de Mataderos, 2014 o 2015, empiezo con el mosaiquismo. Ahí pude ampliar la paleta de colores y los tamaños, cosa que no podía hacer con los estampados en piedra, algo que era muy limitado. Acá ya está toda la colección, casi cuarenta piezas de Diego en mosaico, más todo lo que es coleccionismo, lo que hace que este sea un lugar muy lindo, con piezas en el techo, único. Se puede visitar y cada pieza es una historia para contar”, nos cuenta.
Marcelo ama a Diego, genera lazos con gente relacionada con El Diez, tiene charlas con ex compañeros del más grande y, a puro trabajo, se convirtió en un mosaiquista avezado: “Diego Maradona fue el disparador de todo lo que para mí fue el mosaiquismo. Llegué a un seminario, prácticamente, sin tener experiencia y me mandé. Estaba desesperado por hacer a Diego. En el mosaiquismo, la parte más difícil es el retrato, que es lo que yo elijo. Y el tema es lograr una reproducción exacta, fiel de lo que es Diego. No podés hacerlo parecido o similar. Eso lo hemos logrado en esta colección”.
En cuanto a la articulación con La Casa de Dios, Chiarello explica: “Vamos a hacer murales, pintaremos, hermosear el lugar. Pensamos que va a ser una conjunción perfecta: museo, Bendito (10) y La Casa de Dios. Hoy por hoy son los tres lugares relacionados a Diego que hay en el barrio. Comparándolo con Nápoles, debería ser mucho más lo de acá. Pero hoy es esto. En cuanto al mosaiquismo, había una actividad que me estaba esperando y era esta. Me han pedido de otros jugadores, de otra gente y no es lo mismo. No es por la plata, es por amor a Diego. ¿Por qué? Por todas las alegrías que nos dio. Recuerdo a mi vieja, a mi tía viendo un partido de fútbol para ver a Diego, después nunca más. Se sentaban a ver a Diego. Era un show. Tenías el teatro en tu casa, por la tele”.
La propuesta de Bendito (10) incluye el hacer un recorrido, que Chiarello define como transformador: “Entran acá con una idea de Diego y salen con otra. Tengo muchas historias contadas de gente allegada a Diego -familiares, ayudantes de campo, preparadores físicos- que sale con otra idea. Te agradecen, escriben en el libro destacando lo que aprendieron de Diego. Yo vengo de la psicología social y se habla de la disminución de las virtudes y la exaltación de los defectos, ¿no? Es un poco eso. Ya sabemos que Diego fue el mejor de la historia. Incomparable. Por eso esto es un poco devolverle a él las alegrías que nos dio, aunque nunca llegaemos a saldar esa deuda».
«Escuché una frase muy buena de un periodista hace poco: Diego eligió vivir sin hacerse el boludo. Esa frase lo define de cuerpo entero. Podría haber sido amigo de los grandes millonarios de este país y del mundo y sin embargo eligió otra cosa. Fíjate que dice cosas como que ‘hay que ser muy cagón para no defender a los jubilados’. Lo dijo veinte años atrás. Un adelantado Diego. Tuve la suerte de hablar con el Bicho Pellerano, que fue el capitán de Diego, con Yacobetti que fue el remplazo y te dicen que la pelota era un hueso más de él. A Pellerano lo llama Francis Cornejo para que lo vea. Pellerano venía de River y le dice Cornejo: vos que viste a Alonso y otros grandes jugadores, quiero que mires a este pibe. Y cuando lo vio se volvió loco, como todos”, se entusiasma.
La Cafetería de Dios: Claudio y la Patria sin precio
A unos pasos de distancia de Bendito (10), en Avenida Álvarez Jonte 2200 esquina Gavilán sorprende La Cafetería de Dios. Claudio, viejo vecino del barrio y dueño del lugar, analiza este polo Paternal maradoneano: “Todavía no se llegó a armar bien, que yo sepa. Ahí estamos, está dando vueltas mucha gente. La idea de la cafetería surgió porque acá era donde paraba Diego, era la pizzería donde venía Diego cuando salía de entrenar, por ejemplo. Se llamaba La Cuneta. Yo tenía un salón de fiestas, acá abajo y apareció lo de Diego y seguimos con la cafetería y en 2020 se armó La Cafetería de Dios. Nos visitan las hermanas, los familiares de él ya han venido acá a fiestas, los sobrinos. Y el barrio cambió un montón cuando él falleció, despertó, digamos, porque antes, para nosotros, Diego era un vecino más. Estábamos acostumbrados. Las hermanas siguen viviendo acá a la vuelta. Diego vivió en el barrio hasta que se fue a Boca. Dos años estuvo, después iba y venía”.
Ante la pregunta de si su amor por Diego viene desde antes, responde: “A mí me agarró en una época de mucho trabajo. No lo veía tanto. Después sí y las veces que lo vi te dabas cuenta de que es único, no hay otro. No va a haber otro. No creo que aparezca alguien que lo supere.. Ayer estaba viendo todas esas escenas en la cancha que lo cagaban a patadas y el tipo se levantaba y seguía. Ayer vi eso y por eso digo que no hay otro. Sacando a Messi del medio, todos son así ahora: si lo ves en cámara lenta, el tipo ya está gritando antes de que lo toquen”.
El interior de la cafetería es una suerte de museo maradoneano: fotos, réplicas de copas, banderines. “Despacito. Solo se va dando. Y con Bendito (10) nos potenciamos, todo sirve. La gente viene acá, va para allá, está La Casa de Dios y está el club, lleva mucha gente el museo de Argentinos. Es una recorrido de una hora y media en la cual se explica tanto la vida del club como la de él”.
Diego es una puerta para que se reconozcan a todas las figuras surgidas de Argentinos Juniors, afirma: “Es impresionante. Por eso dicen que es el semillero del mundo. Y lo sigue siendo. Fijate sino Alexis McAllister. Iba al colegio con mi hija en la escuela secundaria de Argentinos, se recibió ahí. Hay gente que viene todos los días y surgen historias. El otro día vino un señor y me preguntó si me acordaba de él. Claro, me compraba hace veinte años en la fiambrería. Y terminó siendo el podólogo de Diego, me mostró fotos con él. Viene otro y me dice que fue el primer abogado que tuvo Diego. Después un señor al que Diego le decía ‘mi hermano’ en Nápoles, porque la hermana de este señor era la cocinera de Diego. Todos los días aparecen esas cosas. Cuando terminen el mausoleo que están haciendo, esto va a explotar. Mi papá lo conoció porque era miembro de la comisión directiva de Argentinos Juniors. Y en un sorteo, después, se saca el viaje para ir a ver el repechaje con Australia, en 1993 y fue con mi hermano ida y vuelta con Diego en el avión, estuvieron en el hotel, comían juntos”.
Claudio también tiene una revelación sobre el doping en el Mundial 94 de Estados Unidos: “Eso fue una trampa, de alguna manera buscaron la vuelta para pararlo. En el Mundial 94 a Diego, Estados Unidos le había ofrecido cien millones de dólares para que renuncie a ser argentino y sea ciudadano estadounidense y él dijo: ‘Señores, la Patria no tiene precio’. Ahí le hicieron la cruz y no pudo entrar más a Estados Unidos. A cualquiera le ofrecen cien millones y deja de ser argentino. Eso fue así. Todas en contra. Luego se muere de tristeza, se murió solo, se dejó morir. Es lo que dicen las hermanas, que se dejó morir unas vez que murieron el padre y la madre”.
Fiorito, la nueva Belén: Amando a Mardona
Para una miles de argentinos y napolitanos, el 30 de octubre es la Navidad contemporánea. Y este 30 de octubre del 2024, que podría leerse como el año 64 d.D., se inauguró en el distrito de Lomas de Zamora el Parque Diego Armando Maradona. Gianinna, Claudia Villafañe, Lalo Maradona y Benjamín Agüero Maradona, participaron de la presentación de Comunidad de D10S, el nuevo Circuito Turístico, Deportivo y Cultural del Municipio. Por ahí también deambulaban campeones del 86 como Burruchaga, el Checho Batista y el Vasco Olarticoechea. También recorrieron Tierra Santa Piti, de Las Pastillas del Abuelo, y Jorge Boido, el incansable fotógrafo que registra murales dedicados al mejor futbolista de la historia.
Comunidad de D10S tiene siete postas que reflejan hitos de la vida de Diego en Fiorito: el Centro Cultural Fiorito, el Parque del Municipio que lleva su nombre, la Estación ferroviaria con una escultura, la Primaria N°63 a la que asistió el Diez, la Primaria para Adultos N°706 que está emplazada en el lugar donde estudiaba de niño, su casa natal ubicada en Azamor 523 y el potrero donde jugaba con el equipo Estrella Roja, hoy Estrella Unidos de Fiorito. Un recorrido de calles franqueadas por casas bajas y sencillas conducen desde el Parque recientemente inaugurado hasta la casa natal de Pelusa. Las referencias y murales de Diego celebran la caminata. La gente del lugar toma mate en las veredas de sus casas. Saludan con cortesía a cada visitante. El silencio del barrio resume una vida tranquila y digna. Pibes y pibas juegan en las veredas. La estación de trenes del lugar dejó de operar en 2017 por un descarrilamiento que terminó con el ramal. Pese a que la suspensión lleva más de 5 años, la Comisión de Vecinos y Organizaciones del Belgrano Sur y las autoridades ferroviarias proyectan la reactivación del ramal y de la estación, en cuyo cartel, intervenido, se puede leer: F10RITO. A escasas cinco cuadras se ubica esa casa humilde en la cual Diego transcurrió su niñez hasta mudarse con su familia a La Paternal. Azamor 523, Fiorito, nueva Belén. Lo demás es magia.
–Bendito (10). Linneo 2196. La Paternal, Ciudad de Buenos Aires. Horarios: martes, jueves y viernes de 13.30 a 18 horas. y los sábados de 12 a 18.
-La Casa de D10S. Lascano 2257. La Paternal, Ciudad de Buenos Aires. Martes, jueves y viernes, de 13:30 a 18 horas, y los sábados de 12 a 18.
-La Cafetería de D10S. Álvarez Jonte 2200, La Paternal, Ciudad de Buenos Aires. 10 horas a 21 horas.